Jugar contra Carlos Alcaraz no es jugar contra cualquiera. Matteo Arnaldi, una de las revelaciones de la temporada y una de las grandes promesas del tenis mundial, lo sabe perfectamente.

Este joven tenista italiano se enfrentó a Alcaraz en los octavos de final del US Open después haberse cargado contra todo pronóstico a Cameron Norrie en tercera ronda.

Desparpajo, agilidad y velocidad definen a este jugador que no dudó en valorar positivamente su duelo ante el campeón del Wimbledon a pesar de la derrota.

"Jugar en el estadio más grande del mundo, lleno de gente, y contra un número uno del mundo fue la mejor experiencia que podía llevarme conmigo. Salí de ese partido con la sensación de que no estoy tan lejos de los jugadores más top", confesó en 'Tutto Sport'.

"Está claro que aún tengo muchas áreas en las que mejorar, pero el partido ante Carlos fue un punto de referencia para mí, me ayudó a entender qué es lo que estos campeones hacen mejor", añadió.

Su gran papel en Nueva York le permitió meterse en el top 50 por primera vez en su carrera. Ahora Arnaldi analiza los retos que le depara el futuro: "El primer reto que tengo ahora es mantener esa posición en el top-50, me toca defender en torno a cien puntos de aquí a final de año y no es un reto fácil".

"Quizás, el reto más exigente que me he propuesto ahora mismo es terminar el 2023 en una posición que me permita ser cabeza de serie de cara al próximo Open de Australia", concluyó.