Campeón del Open de Australia, ganador de Roland Garros, retirado de Wimbledon en semifinales... y ahora en segunda ronda del US Open, un torneo que no jugaba desde 2019. Rafa Nadal está cuajando, a sus 36 años, una enorme temporada en los grandes y en el torneo neoyorquino podría finalizar como número 1.

A pesar de ello y no habiendo perdido ningún partido, las lesiones en el tobillo y en el abdomen han lastrado mucho el rendimiento del manacorí este 2022.

En su debut en el Abierto de Estados Unidos, Nadal ha vencido a Rinky Hijikata después de perder el primer set, algo prácticamente insólito este año para Rafa.

Tras el partido, reflexionando sobre lo que va de temporada, el ganador de 22 Grand Slams ha explicado la diferencia que ve entre perder un partido o retirarse del mismo.

"No he perdido ningún partido, pero no gané los tres torneos, así que... De alguna manera, sí, fue aún más difícil. Retirarse es, en mi opinión, mucho más difícil que perder", ha señalado.

"Esa es la cosa, ¿no? El deporte se trata de ganar o perder, no de retirarse. Cuando te retiras, no puedes competir. La sensación es mucho peor que perder un partido. Pero eso fue lo que pasó. De alguna manera, también es parte de mi carrera de tenis", ha añadido.

Las lesiones han lastrado el nivel de Nadal este 2022, pero tras el Master 1.000 de Cincinnati, el balear parece estar recuperado: "Por otro lado, por supuesto que estoy teniendo un año increíble en términos de resultados, pero al mismo tiempo un año difícil porque pasé por lesiones en el pie, la costilla, y luego el desgarro en el abdomen".

"Pasaron muchas cosas durante los últimos seis meses y medio, siete meses. Al mismo tiempo, regresamos de tiempos difíciles. Sí, no puedo quejarme mucho. Pude ganar torneos y estar en la posición en la que estoy hoy, que pude volver a ganar un partido. Estar en la segunda ronda del US Open es importante para mí. Pude remontar después de un duro primer set", ha zanjado.