Tras terminar la segunda parte de la temporada 2022 envuelto en una espiral de lesiones que le dejaron KO tanto en Wimbledon como en el US Open, Rafa Nadal ha vuelto a recaer en la segunda ronda del Open de Australia.

El manacorí, que ha sucumbido por 6-4, 6-4 y 7-5 frente al estadounidense Mackenzie McDonald, ha jugado la mayor parte del partido con problemas en la cadera.

Con 4-3 en contra en el segundo set, Nadal notó "algo" en la zona trasera de la espalda y, a pesar del dolor, se negó a rendirse.

"He notado algo en la cadera y se acabó. No puedo decir que no estoy mentalmente destrozado porque estaría mintiendo", ha señalado tras el partido.

"Es un día difícil. Estoy cansado de las lesiones. Es muy duro mentalmente volver a pasar por este proceso y el trabajo que necesitaré para la recuperación", ha añadido.

"No le pregunté al fisio si me tenía que retirar porque conozco mi cuerpo. Soy lo suficientemente mayor para tomar mis propias decisiones. No quería retirarme y abandonar la pista porque era el defensor de la corona aquí. Lo que he hecho es intentar seguir sin hacerme más daño. No podía correr y tampoco pegar el revés", ha zanjado

De esta manera, Rafa se despide de Australia sin poder revalidar el título conseguido en 2022 frente a Medvedev y siendo consciente del bajón que sufrirá en el ranking, pero con una tremenda ovación de la Rod Laver Arena que refleja la admiración del público 'aussie' por el español. Roland Garros ya está en la mira.