El tenista Corentin Moutet ha protagonizado un espectáculo bochornoso durante la primera ronda de la fase previa del Argentina Open. El 142º del mundo se empeñó en llamar la atención del público a toda costa con un comportamiento cuanto menos discutible.
Bajo el calor de Buenos Aires, Moutet decidió pedir una botella de dos litros de bebida gaseosa durante el descanso entre sets de un encuentro que acabó perdiendo.
Sin embargo, el esperpento no se quedó aquí. Tal y como refleja 'La Nación', el tenista discutió con el público para después rechazar ser atendido por las asistencias tras haberlas pedido anteriormente.
Para ponerle la guinda, el galo disputó un encuentro con bastante desgana, realizando saques desde abajoy golpeando la bola con ninguna intención, algo que completa este abanico de actitudes extravagantes.