La historia de John Drage es todo un ejemplo de vida. Hace cinco meses, le diagnosticaron un cáncer cerebral. Sólo le daban un año y medio de vida, pero John tenía claro que no se iba a rendir.

"He estado esperando este día desde que el doctor dijo que podía hacerlo", reconoce. Ahora, ha logrado su sueño: completar medio Ironman.

Dos kilómetros andando, 90 en bicicleta y 25 corriendo. Es el reto que ha tenido que superar a sus 52 años: "Miro a la muerte y digo: 'vale, voy a ser lo más feliz posible en este tiempo'".

Un ejemplo de superación y de vida que resume con una frase: "No podemos simplemente rendirnos y morir. Hay que luchar".