Por lo menos tres jugadores -Malcolm Jenkins, Torrey Smith y Chris Long- aseguraron públicamente ante diferentes medios de comunicación que no tienen la intención de acudir a la habitual recepción presidencial a los campeones del torneo.
"Personalmente no anticipo asistir a esa cita", señaló hoy a la cadena CNN el jugador afroamericano Jenkins, que dijo no tener ningún mensaje para Trump después de la victoria (41-33) lograda este domingo por su equipo contra los Patriots de Nueva Inglaterra en la 52ª edición de la Super Bowl.
Uno de sus compañeros, Chris Long, aseguró en una entrevista con una radio local que tampoco se personará en la recepción del mandatario, para la que aún hay que fijar una fecha. "No, no voy a ir a la Casa Blanca. ¿Estás bromeando?", apuntó Long, que ya desestimó la misma invitación el año pasado tras proclamarse campeón con los Patriots de Nueva Inglaterra, su anterior equipo.
En los últimos meses, Trump ha atacado repetidamente a numerosos jugadores de la NFL por arrodillarse durante el himno nacional en señal de protesta contra sus políticas. De hecho, el mandatario instó el pasado septiembre a los dueños de esos equipos a despedir a los jugadores críticos y añadió que, si los aficionados "abandonaran el estadio" cuando tienen lugar protestas de ese tipo, esas "cosas pararían".
En este sentido, el también jugador de los Eagles, Torrey Smith, lamentó días antes de la final que el presidente del país cargase de esta manera contra compañeros que protestaban contra el racismo en Estados Unidos. "No estamos protestando contra el himno, es una protesta durante el himno", indicó el receptor afroamericano, que aseguró que tampoco irá a la recepción en la Casa Blanca.
Después de la final de la Super Bowl de este domingo, Trump felicitó al equipo de los Eagles por una "estupenda victoria" contra los Patriots, teóricos favoritos a alzarse con el título nacional.
Tribunales
La fiscalía sueca archiva la investigación por violación con la que se relacionaba a Mbappé
El contexto En una reciente entrevista, Mbappé dijo que "nunca" se había sentido preocupado por el caso. Aunque reconoció que "hay mucho ruido", aseguró que había intentado concentrarse en su trabajo.