Es el hombre más rápido del planeta. El atleta que ha sido capaz, en los 100 metros lisos, de colgarse el oro en París. En los Juegos Olímpicos. El que estará en los libros junto con nombres como, por ejemplo, el de Usain Bolt. Sí, es Noah Lyles. Es el estadounidense Noah Lyles. Es quien ha sido capaz de correr en tan solo 9.79 en una de las pruebas olímpicas más míticas de la historia.
Es lo que es, pero también es mucho más. Y sobre ello quiso incidir. No sobre su oro, sino sobre lo que hay detrás de su metal. Sobre lo que tiene. Sobre lo que, eso sí, no le define.
Fue en un mensaje en redes sociales, una vez consumó su victoria en los 100 metros lisos sobre el jamaicano Kishane Thompson en la misma línea de meta. En una final de 'photo finish' que se decidió por escasas milésimas.
"Lo que tienes no define lo que puedes ser"
En la red social 'X', anteriormente conocida como Twitter, compartió un mensaje de motivación, de superación, que dice mucho de la persona y del atleta.
"Tengo asma, alergias, dislexia, TDA, ansiedad y depresión", comenzaba su texto.
Y continuaba: "Pero te diré que lo que tienes no define qué puedes llegar a ser. ¿Por que no tú?"
"Es una paliza a nivel emocional"
Y es que Lyles ha tenido que lidiar con diversos problemas de salud mental, tal y como ha reconocido en diversas entrevistas en las que reconoció haber sido víctima de bullying cuando estaba en el colegio.
"Es una paliza a nivel emocional. Es lo que realmente te destroza", comentó en su momento el que ahora es el hombre más rápido del planeta.