Choca con las investigaciones

Habla la viuda del ganadero asesinado en Ribadesella: fue agredida y los encapuchados querían dinero

Los detalles En una conversación con laSexta, la viuda ha reiterado que tanto ella como su cuñada estaban en la vivienda el mismo día del crimen. Según indica, es entonces cuando le agreden a ella también. Además, dice que hay un parte de lesiones suyas y que lo incorpora en la denuncia.

Las claves del crimen de Ribadesella
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Los investigadores continúan indagando en la escena del brutal crimen en el que este hombre de 60 años murió en Ribadesella (Asturias) al recibir una salvaje paliza en la puerta de su casa. El asesinato de este ganadero se produjo a plena luz del día, pero ni los vecinos ni las cámaras de la zona vieron a nadie.

La viuda de Toño Otero, el ganadero asesinado a golpes en su finca de Ribadesella, en cambio, mantiene la versión que le contó a la Guardia Civil. En una conversación con laSexta, la viuda ha reiterado que tanto ella como su cuñada estaban en la vivienda el mismo día del crimen. De hecho, así las capta las cámaras mientras la Guardia Civil está llevando a cabo la inspección ocular de la finca. Una declaración ante los agentes que se dijo de seis horas, y que hoy sabemos que fue de dos horas.

Pero la viuda de Otero ha aportado nuevos datos a laSexta. Nos ha contado que ella está en la cocina preparando unos quesos, su hermana en una habitación de la casa en el piso superior. Y que entra Toño -la víctima- al interior, seguido de los dos encapuchados que le están pegando y le ponen una manta en la cabeza. Ella va hacia ellos para intentar detenerles y, según cuenta, es entonces cuando le agreden a ella también. Es más, dice que hay un parte de lesiones suyas y que lo incorpora en la denuncia.

Después de esto, ella asegura que escucha a los dos encapuchados preguntarle a su marido, que está ya agonizando, "¿dónde está el dinero?". En ese momento es la cuñada que está en una habitación del piso superior la que baja alertada por los gritos, abre la puerta y los encapuchados huyen.

Según la investigación, no hubo robo

Pero la investigación señala que no hubo robo. Eso es un dato objetivo de la investigación: no se llevaron nada. Tampoco las cámaras graban a ningún encapuchado a pesar de que aseguran que les vieron huir, saltar un muro de una finca colindante y escapar. Ni siquiera ladran los perros ni ningún grito alerta a los vecinos.

Los datos que por ahora tiene la Guardia Civil sobre la mesa es que Toño murió por golpes contundentes en la cabeza, presuntamente con una barra de hierro. La autopsia se le ha realizado, no ha trascendido para no entorpecer la investigación pero sí sabemos que la familia pedía incinerar el cuerpo y la juez que instruye el caso lo ha impedido hasta no completar las diligencias forenses: por si hubiese que realizar alguna prueba más. No se produjo ningún robo y tampoco se ha encontrado ninguna arma del crimen.

Además, la investigación se centra ahora en la triangulación de los teléfonos para ver exactamente qué personas estaban en la finca el pasado viernes a las doce y cuarto de la mañana cuándo se produjo el crimen.