Jaume Masiá ya es campeón del mundo de motociclismo. El piloto valenciano, de 23 años, se ha proclamado vencedor del Mundial de Moto3 después de una encarnizada batalla con Sasaki en el GP de Qatar. Al final no pudo contener la emoción, y se dejó llevar en una celebración tras una jornada que va a recordar durante toda su vida.

"Al final, les joda o no ha ganado un español... y esto es lo que hay", afirmó Masiá.

Todo, eso sí, tiene su explicación: "Me parece muy injusto. Ya desde Malasia teníamos una estrategia con Adrián y es vergonzoso e inaceptable que Dirección de carrera se rebaje al nivel de decirnos que no podía seguir a Sasaki".

"Nos dijeron que no podía molestarle. Que era injusto. Que no podía estorbarle. Él, simplemente, le seguía. Yo no sé que pensar", insiste.

"Mi ego no podía permitirlo"

Y prosigue: "Mi ego no podía permitir que me ganase. Visto que nadie me ha ayudado en todo este año todo iba a depender de mí. He luchado con muchas ganas, y tenía la sensación de que habría luchado otras 20.000 vueltas más".

"No me he cansado en ningún momento. He tenido una fuerza increíble en toda la carrera. Mi intención era seguir dando caña. Tenía unas ganas...", explica Masiá.

Porque el valenciano está en una nube: "No me lo acabo de creer. Esto es un honor. No sé ni lo que estoy sintiendo. Solo quiero ver a mi familia y de celebrarlo con ellos. Se lo merecen más que yo".

"Todos me han ayudado mucho, no puedo decir más que gracias. Gracias a todo el mundo", sentencia Masiá.