Se avecina una posible temporada llena de problemas y de dificultades para Marc Márquez.El piloto catalán, que está por fin recuperado por completo de todos sus problemas físicos, se ha encontrado una Honda lejos de la que cabe esperar de una marca que quiere conquistar el Mundial de MotoGP.

Al menos, de momento. Los test en Sepang están dejando claro que los japoneses necesitan mejorar, y no precisamente poco, después de un par de días en los que sigue sin haber demostrado nada que pueda preocupar a, por ejemplo, Ducati.

En mitad de tabla se ha quedado. Con un crono de 1:59.450 a unas siete décimas del registro marcado por Jorge Martín, líder de la sesión. Lo peor, que Joan Mir y Alex Rins, los recién llegados, no es que estén mucho mejor.

"Solo hemos podido rodar 25 vueltas en seco, pero ha sido bastante para probar las tres motos. Es complicado, porque sales a pista con una diferente y con cosas que probar... pero es el momento de hacerlo", cuenta.

Le ha servido para descartar una de las motos que estaba probando en Sepang: "Vamos a necesitar lo propietario. Ha habido una moto con la que he estado mejor, es la que he elegido. Hay otra diferente. No con gran potencial, pero sí con cosas interesantes".

Mucho trabajo queda por delante para Honda y Márquez: "Estamos usando mucho tiempo para comparar. Queremos ser muy precisos para no perder el camino... pero estamos lejos de los pilotos más rápido. Es obvio".