Este jueves se cumplen 20 años de la primera victoria de Fernando Alonso en la Fórmula 1 y, desde que debutase con Minardi en 2001, el asturiano se ha convertido en el piloto con más Grandes Premios disputados en la historia.

El bicampeón ha tenido muchos años dorados además de los de los títulos con Renault, pero también ha tenido otros en los que por falta de motivación (sonados son los de McLaren-Honda), no ha exprimido al máximo su potencial.

Sobre ello ha hablado en el podcast 'High Performance', reconociendo haber sido "perezoso" en alguna ocasión, incurriendo en uno de los siete pecados capitales.

"Quizá haya sido un poco perezoso durante la semana, durante la preparación o el entrenamiento. A veces recibimos un documento sobre los cambios en el circuito, sobre todas estas cosas. Tal vez no lo leí detenidamente porque no estaba muy motivado para ese fin de semana", ha explicado.

Sin embargo, era entrar en el monoplaza y conforme avanzaban los entrenamientos, su mentalidad cambiaba.

"Eso siempre cambia en la primera sesión de entrenamientos libres del viernes, cuando te ves 12º y quieres estar 10º, porque piensas que quizá es posible. Muy fácilmente te motivas durante el fin de semana y, cuando llega el domingo y comienza la carrera, siempre he estado 100 % listo", ha añadido al respecto.