Después de que la FIA castigara a Max Verstappen con trabajos comunitarios por decir palabrotas en sala de prensa, el neerlandés avisó de que si las cosas continuaban así no descartaba dejar la Fórmula 1 a corto plazo. Y en Red Bull le creen.
Max habló de "tonterías": "Si tienes que lidiar con todo este tipo de tonterías para mí no es una forma de continuar aquí... seguro".
Helmut Marko, por su parte, lanzó un serio aviso en 'Motorsport' diciendo que podría ocurrir perfectamente: "Hay que tomarse a Max en serio. Ha conseguido mucho, pero para él es importante disfrutar de todo en la F1. Si eso le es cada vez más complicado, entonces es de un carácter que cuando dice: 'Vale, ya está', ya no hay marcha atrás".
"Lo dice en serio, pero espero que la situación actual no le haga retirarse pronto", continuó Marko.
Defendió sus palabras en rueda de prensa, explicando que ese "jodido" se refería exclusivamente al monoplaza y no a ninguna persona: "No se refería a una persona. Se refería al coche, a un objeto, y no lo hizo de forma desagradable".
"Vale, quizá en una rueda de prensa que se hace por la tarde, si todo se va a tratar de forma tan estricta, en el futuro adoptes un enfoque diferente. Pero es claramente exagerado", sentencia Marko.
Max está defendiendo título en la Fórmula 1. Y camina hacia el cuarto seguido. Eso sí, con un coche mucho menos competitivo que en el pasado y un McLaren y Lando Norris poco a poco pisándole los talones.