Quinto fue Fernando Alonso en los Libres 2. En los Libres 3, incluso mejor. Cuarto, con unas buenas sensaciones que hasta él mismo reconoció sobre un Alpine que parecía "rápido". Sin embargo, no fue tan rápido como para superar la Q2 de la clasificación del GP de Miami.

Fue por 32 milésimas, pero Alonso ya sufrió mas de la cuenta en una Q1 en la que la mejora de la pista con cada segundo que pasaba era más que evidente. Fue en su último giro, con nuevos neumáticos, como logró Fernando pasar un corte en el que Lewis Hamilton tampoco estuvo precisamente tranquilo con el Mercedes.

Con Esteban Ocon fuera de juego por su accidente en la curva 14 de los Libres 3, era Alonso la única esperanza de un equipo que lo pasa mal, muy mal, en tanda larga por la degradación de neumáticos. Todo estaba sobre él, y no pudo ser.

El segundo sector, horrible

Mejoró en el primer sector, pero en el segundo el plan se vino abajo. El de curva lenta, el otro punto débil del Alpine, dejó sin opciones a Fernando Alonso. El tercero, igualmente en amarillo.

Ni siquiera pudo, con su último crono, poner al coche entre los diez mejores. No dio la vuelta, la que hay que dar, la perfecta, en el intento que tuvo cuando para todos mejor estaba el nuevo asfalto de Miami.

Esas 32 milésimas, un parpadeo, que le separaron del AlphaTauri de Pierre Gasly, fueron la diferencia entre poder luchar por la pole, por estar en un buen puesto de parrilla, de ser undécimo. Y Miami no tiene pinta de ser una pista en la que adelantar sea sencillo...

Además, entre él y Sainz hubo un conato de investigación por obstaculización en la Q2 que, tras la revisión, quedó en nada.

Y en carrera, el Alpine sufre

Mucho va a tener que remar Fernando en carrera, con un coche que sufre en tanda larga por la degradación, en una prueba que presumiblemente irá a dos paradas... o a tres.