La masiva llegada de estrellas del fútbol a Arabia Saudí sacudió por completo el mercado de fichajes. La moda de marcharse a clubes de la Liga Saudí iniciada por Cristiano Ronaldo marcó la última ventana de verano con salarios desorbitados, aunque ya hay algunos que quieren renunciar a ello.

Jordan Henderson, excapitán del Liverpool, fichó por el Al-Ettifaq, equipo entrenado por Steven Gerrard, por un sueldo anual de 40 millones de euros al año. Fue uno de los fichajes más sonados durante el pasado verano. Sin embargo, su paso por Arabia no está saliendo como planeaba.

De hecho, el jugador quiere finalizar su contrato cuanto antes y desea salir en este mercado de invierno. Según comenta 'Daily Mail', Henderson no ha sido capaz de adaptarse a este nuevo estilo de vida ni a las altas temperaturas del país asiático. Los malos resultados deportivos tampoco han ayudado. El Al-Ettifaq no ha ganado ninguno de sus últimos ocho partidos, por lo que el puesto como técnico de Gerrard también pende de un hilo.

Lo cierto es que la llegada del jugador inglés a tierras árabes ha conllevado polémicas desde el principio. Ya en el vídeo de presentación del fichaje de Henderson, el club árabe coloreó de blanco y negro la bandera arcoíris que se dibujaba en su brazalete de capitán con el Liverpool. Teniendo en cuenta que el jugador se ha mostrado siempre en favor de los Derechos Humanos, esta acción no pasó desapercibida.

El propio seleccionador inglés, Gareth Southgate, tuvo que defender a su jugador después de que este fuera abucheado en Wembley en un encuentro que enfrentó a Inglaterra y a Australia el pasado octubre.

Sin embargo, el mayor de los escollos para la salida de Henderson puede ser el propio gobierno saudí. Las altas cifras de su contrato supondrían que el británico tendría que pagar 8 millones de euros por temas fiscales. Este sería el principal factor que podría determinar la salida o la permanencia del jugador de la Liga Profesional Saudí.