El jugador del Athletic Club Mikel San José considera que Iñigo Cabacas, el aficionado del equipo rojiblanco fallecido tras ser alcanzado por una pelota de goma disparada por la Ertzaintza, "no murió, lo mataron, y les ha salido barato".

"Un gran abrazo para Fina y Manu; ante la injusticia solo nos queda la solidaridad. No olvidaremos", se puede leer en un tuit del jugador navarro, que muestra su "solidaridad" con los padres de Iñigo Cabacas.

Este jueves, la Audiencia de Bizkaia condenó a dos años de cárcel y cuatro de inhabilitación para el ejercicio de su profesión a uno de los seis ertzainas juzgados por la muerte de Iñigo Cabacas tras ser alcanzado por una pelota de goma en una carga fuera del estadio tras un partido europeo en San Mamés el 5 de abril de 2012, por un delito de homicidio por imprudencia grave profesional.

La Audiencia vizcaína condenó a un oficial, el mando de mayor rango en el operativo policial tras un partido europeo entre el Athletic Club y el equipo alemán Schalke 04, y absolvió a los otros cinco ertzainas juzgados en este caso, dos suboficiales y tres agentes de base.