Siguen saliendo a la luz trapos sucios de José María Enríquez Negreira, excolegiado de Primera División y exvicepresidente del Comité Técnico Arbitral al que se le vincula con el FC Barcelona.

El extrencilla cobró cerca de siete millones de euros en 17 años del conjunto azulgrana por 'asesoramiento' mientras su hijo acompañaba a los árbitros a los partidos en el Camp Nou.

Pues bien, si en 'El Chiringuito' Cristóbal Soria confesó que Negreira trató de persuadirlepara un negocio de perfumes, ahora ha sido un excolegiado el que ha tirado de la manta.

Sergi Albert Giménez compartió época de arbitraje con el investigado y no esconde su desconfianza hacia él: "A mí me sorprende que tenga Alzheimer así de repente".

"Es un señor prepotente y le gusta intimidar", explica en declaraciones a 'Radio Marca', desvelando las presiones que recibió en su época pitando.

"A mí me presionó Negreira. Me reunió con otros árbitros y me dijo: 'Oye pollo, ten cuidado con lo que dices en televisión. Tú ya me entiendes. Ándate con cuidado'", ha confesado.

"Hay una fórmula para amañar partidos. Es una trampa de tontos: soy amigo de fulano de tal que te va apoyar, me das tanto y te lo soluciono. Si el resultado es negativo se le devuelve el dinero. Si gana, queda marcado de por vida. Si pierde y devuelve el dinero, tiene otra oportunidad", ha añadido.

Según Albert Giménez, este era el 'modus operandi' de Negreira: "Él ha presumido siempre de tráfico de influencias. Él ha vendido que era un líder y lideraba el Comité de Árbitros. Y al Barcelona se lo vendió así. Negreira se ha autodenominado un líder de referencia. Yo nunca lo he creído. Siempre he guardado mis distancias con él".

De hecho, se aventura a desvelar una corruptela en las semifinales de la Copa de la UEFA de 1984 entre Anderlecht y Nottingham Forest: "Soy consciente de que compraron a un árbitro, Emilio Guruzeta. Enríquez Negreira era linier".

Sobre el hijo de Negreira, resta hierro al asunto: "En ciertos partidos y con ciertos árbitros sí les acompañaba. Esto puede influenciar, pero es algo más normal".