Eden Hazard es la gran noticia que el Real Madrid se lleva de Vitoria. El belga, goleador y asistente, parece recuperar la buena senda para fortuna de un Zidane que no se sentó en el banquillo ante el Alavés por el coronavirus.
El 7 del Real Madrid anotó una diana justo antes del descanso, demostrando calidad y definición ante Pacheco. Fue Kroos quien robó el cuero para dárselo al belga y que este, tras pinchar la bola, batiera al meta de los vascos.
Sin embargo, la acción que más ilusiona al madridismo es la que acabó con el 0-2 obra de un Karim Benzema que se fue de Mendizorroza con un doblete. En ella, el entendimiento entre Hazard y el galo fue total.
En ella, Hazard recibe un buen pase pero, sabiendo de la posición de Karim, deja pasar el balón tocándolo levemente para que llegue a Benzema. Luego, chut potente del galo directo a las redes.
Es la conexión que más se espera, la que aúna el talento de, posiblemente, los dos jugadores más técnicos que el Real Madrid tiene en su parcela ofensiva.
Se fue al banquillo en el minuto 63 para dar entrada a Vinicius, pero en esa hora Hazard dejó minutos de calidad. Moviéndose bien por la zona ofensiva blanca y, como de él se espera, ofreciendo regate, soluciones y desborde.
Pudo de hecho marcar otro tanto, tras una buena acción individual en el área vasca en la que trató de mandar un zurdazo con efecto a las mallas. Sin embargo, su disparo no cogió la comba suficiente y se fue por poco.
Con todo, está por ver cómo se desenvuelve con un equipo más intenso que un Alavés que despertó tras el descanso, justo cuando el belga comenzó a brillar menos.