La capacidad de exposición y contagio del coronavirus en espacios cerrados sigue siendo tema de debate entre expertos a día de hoy. Si bien es sabido por muchos que se trata de un virus que se expande con mucha facilidad, normalmente no llegamos a conocer -o hacemos caso omiso- los datos que exponen la facilidad con la que se mueve la COVID-19 y la peligrosidad real que representa. Un simulador permite comprobarlo ahora.
Ha sido el periódico semanal alemán 'Die Zeit' quien ha creado esta más que interesante herramienta que, de acuerdo a una serie de cálculos, realiza un promedio de personas que pueden resultar contagiadas en un espacio concreto según las características que presente y cómo interactuemos nosotros con el mismo. En otras palabras, sirve para ser conscientes de las múltiples formas en las que podemos sufrir la infección.
'Die Zeit' ha realizado esta simulación atendiendo a los siguientes factores: los metros cuadrados de la sala en cuestión, el número de personas que se encuentren en ella y el tiempo que pasen allí. Pero además, tiene en cuenta otros elementos adicionales, como el uso de según qué mascarilla, el tipo de ventilación, el tiempo y el volumen al que hablemos y la altura del techo también se tienen en cuenta si hablamos de los riesgos del contagio.
Por ejemplo, la simulación expone que en una sala de 100 metros cuadrados en la que 36 personas hayan pasado 12 horas juntas sin mascarillas y sin un sistema de ventilación hay un 20% de probabilidad de que se dé una infección a través de aerosoles, y que siete de esas 36 personas acaben dando positivo en coronavirus poco después. Pero si cambiamos los parámetros de la herramienta, obtenemos resultados muy distintos.
Es decir, si al ejemplo anterior añadimos que todas esas personas usen mascarilla quirúrgica, vemos que la probabilidad de contagio baja al 2%, y si a ello le aplicamos un buen sistema de ventilación, baja aún más: menos del 1%.
Otro ejemplo más: si en una habitación de diez metros cuadrados se reúnen cuatro personas que pasan 12 horas juntas, no hay un buen sistema de ventilación y nadie lleva mascarilla, la probabilidad de contagio se dispara hasta el 90%, y la propia simulación indica que todas las personas en esa sala corren el riesgo de sufrir un contagio por coronavirus.
Publicado en la revista 'Nature'
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