"Un batiburrillo de medias verdades", "indignante", "siento vergüenza como colegiado y biólogo", "sin fundamento científico", "espeluznante". Estas son algunas de las reacciones de diferentes expertos en biología ante el polémico informe publicado por el Colegio de Biólogos de Euskadi. Este documento, escrito y firmado por el decano Jon Ander Etxebarria, pone en tela de juicio algunas de las medidas más significativas contra el coronavirus.
En el artículo, llamado 'Reflexiones del decano del Colegio de Biólogos de Euskadi sobre las medidas adoptadas en la crisis de la COVID-19', Etxebarria duda de la eficacia de los PCR, critica el confinamiento y las "medidas coercitivas" que, según el autor, "transgreden los derechos de los individuos", y asegura que el uso de las mascarillas, además de ineficaz, "genera miedo y sospecha de que todos seamos armas biológicas andantes".
Este informe, en un principio abierto y público, ahora está cerrado bajo suscripción a los miembros del Colegio de Biólogos. "Ha sido paralizado y quitado de la web", según ha explicado la institución a laSexta.com, que asegura que "ha habido un problema con el tema" y no ha querido revelar más información. Asimismo, la entidad asegura que en los próximos días publicará una nota de prensa para pronunciarse al respecto.
"Locuras sacadas de Youtube": las críticas de los expertos
A través de redes sociales, algunos miembros de la comunidad científica no han tardado en mostrar su "perplejidad" por las afirmaciones del documento de Extebarria. Dividida en diez apartados, esta publicación señala que los países que han tomado "un confinamiento más estricto, como Bélgica, España y el Reino Unido, son los que tienen una mayor tasa de mortalidad por cada 100.000 habitantes".
Este tipo de afirmaciones han provocado el enfado de Ignacio López-Goñi, microbiólogo y divulgador científico: "Las reflexiones del decano del Colegio de Biólogos de Euskadi son un batiburrillo de medias verdades, errores y malas interpretaciones bastante preocupante. Yo también soy biólogo y no me representa. Me confirma que no debo colegiarme", espeta en su cuenta de Twitter.
El pediatra neonatólogo José Ramón Fernandez coincide con López-Goñi, e incide en que el texto tiene una "escasa o nula evidencia científica y correlaciones de las que sugiere casualidad que no son adecuadas".
Una de las afirmaciones más polémicas del documento es la negación de la eficacia de las PCR. Según Extebarría, éstas "generan incertidumbre" porque "de todos los casos positivos que se detectan al menos el 50% son falsos positivos". Según escribe en su Twitter David Otaegui, biólogo colegiado, "en la parte del uso del PCR como diagnóstico, directamente da datos falsos".
Junto con eso, otras expertas han mostrado su "indignación" con el artículo publicado por el Colegio de Biólogos de Euskadi al escribir que "es espeluznante e indignante lo que llega a decir", y que sus afirmaciones causan "vergüenza" y "son locuras sacadas de Youtube". En la bibliografía del artículo, Etxebarría cita varios vídeos de esta red social así como otras tantas publicaciones de Facebook, algo que, según los críticos, es "impropio de un profesional".
Contra el uso de la mascarilla
El texto del Colegio de Biólogos de Euskadi también deja algunas conclusiones polémicas con respecto al uso de la mascarilla. El artículo señala que éstas "presentan algunas problemáticas", como "la autocontaminación por tocar y reutilizar la mascarilla" y la "expiración, ya que expulsamos cerca de un 4% de CO2, que parte vuelve a introducirse en los pulmones". El autor del texto concluye este apartado con la pregunta: "¿Cuál es la razón para que el Estado español sea el único país de Europa que obligue al uso de mascarillas en espacios exteriores cuando la OMS no lo establece como obligación?"
Si un decano de biología no sabe distinguir entre expirar y espirar, lo lleva regular"
Extebarría asegura también que es "altamente improbable" el contagio por coronavirus al aire libre. El decano lo compara con la gripe: "En estudios realizados por la OMS sobre prevención concluyeron que el uso de mascarillas no prevenía del contagio", afirma. Por otra parte, el autor insiste en que la mascarilla tiene efectos nocivos sobre la salud, especialmente por "problemas" con hongos: "Se han apreciado crecimientos bacterianos (estafilococos, estreptococos, gram, bacilos y bacilos), por lo que no se puede descartar que las mascarillas producieran dermatitis", concluye.
Alberto García-Salido, Intensivista Pediátrico, investigador y colaborador en distintos medios, se ha mostrado irónico ante estas afirmaciones de Etxebarría sobre la mascarilla: "Si un decano de biología no sabe distinguir entre expirar y espirar, lo lleva regular con el resto de cosas", mientras que en otro tuit en el que un usuario le preguntaba sobre qué hacer ante esta publicación respondía: "Ignorarlas tras leer con perplejidad".
Otras conclusiones del informe
El texto publicado por el decano aboga por el desconfinamiento y critica "las contradicciones sanitarias" de las administraciones públicas. Una de ellas, según el escrito, se da con la denominada "inmunidad de rebaño" —es decir, la porción de personas que se han inmunizado de una enfermedad por contagio previo—. Según Extebarría, "cuando se hicieron los estudios de seroprevalencia, se vio con decepción que los porcentajes de anticuerpos eran muy bajos". Ahora, según escribe, se utiliza "una dialéctica del miedo en la población, tomando medidas que restringen las libertades". Ante esto, el autor lanza otra pregunta: "¿No es la mejor prevención [el contagio de la ciudadanía] de cara a enfrentarse con el virus el que consiga una mayor oportunidad como ocurre con la gripe?".
Este último apartado es uno a los que Etxebarría hace más alusión. A lo largo del artículo, hay una comparación constante entre el coronavirus y la gripe. Para el autor, existe correlación entre la alta tasa de mortalidad de ciertos países y su uso de la vacuna de la gripe: "España, el Reino Unido y Bélgica presentan una mayor tasa de mortalidad, siendo la excepción Países Bajos, que con porcentajes altos de vacunación, presenta niveles de mortalidad media-baja". Según el decano, esta excepción es por la aplicación de la eutanasia en el país neerlandés, debido a que reduce la edad media de la población.
Asimismo, el texto recoge otra reflexión con respecto a la vacuna, actualmente en desarrollo, contra la COVID-19: "Hay que decir que esta puede tener grandes incertidumbres de eficacia y de efectos secundarios", asegura. Entre dichas incertidumbres, Etxebarría destaca que "se necesita un tiempo mayor de estudio, cercano a los 6 años" y que "hay que tener en cuenta que podría haber posibles recombinaciones entre el SARS-CoV-2 y la gripe".