CÁCERES
Descubre Cáparra, una ciudad romana poco conocida de Extremadura
Se conserva muy bien y tiene uno de los arcos más imponentes del país.

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Emerita Augusta (hoy Mérida), Tarraco, Itálica (ahora Sevilla)... son muchas las ciudades romanas que un día hubo en España y que todavía hoy siguen teniendo importancia en nuestro país. No obstante, lo cierto es que hubo muchas otras de menos renombre, pero que de todos modos merece la pena conocer. Ese es el caso, por ejemplo, de Cáparra: una ciudad en Extremadura en la que los romanos también dejaron sus huellas.
Situada en el norte de la provincia de Cáceres, entre montes suaves y la Vía de la Plata, Cáparra sorprende por su buen estado de conservación. No tiene tanta importancia como otros yacimientos arqueológicos repartidos por España, pero muestra de igual modo cómo se vivía en la época romana. Y lo mejor: lo hace sin las aglomeraciones que caracterizan a muchas otras.
Gracias a su posición privilegiada en la Vía de la Plata, Cáparra se convirtió en un punto clave de comercio y tránsito. Respecto a esto, cabe apuntar que todavía hoy se conservan tramos originales del pavimento romano, construidos hace alrededor de 2.000 años.

No obstante, estos no son los restos más importantes de la ciudad de Cáparra. De ella, quizá lo más llamativo es el arco Tetrapylon, una estructura única en todo el país por su altura de 12 metros. Con cuatro puertas orientadas a los puntos cardinales, este arco sirvió en su momento como entrada monumental al foro y fue todo un símbolo de la ciudad.
Ahora que se hace mención al foro, debes saber que este es otro de los lugares que pueden visitarse. Al menos sus restos, claro, junto a los de las termas, el anfiteatro y varias domus de las que se conservan sus diferentes estancias. El resultado es un conjunto arqueológico muy bien señalizado que permite hacerse a la idea de cómo era el día a día de esta antigua civilización.
Si bien no era una de las ciudades romanas más grandes, tiene los suficientes elementos como para que merezca la pena visitarla. Además, al visitarla se tiene la oportunidad de disfrutar de un bonito paisaje: el que se extiende a su alrededor, con encinas, alcornoques y mucho terreno de campo que en primavera luce precioso cuando se cubre de flores.
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