Comer con el agua corriendo por tus pies en Villa Escudero

Rodeada de montañas volcánicas, hileras de regios cocoteros, campos exuberantes, caras felices y voces alegres de la gente de la aldea, Villa Escudero te anima a que vayas a conocer el encanto de la vida en el campo de Filipinas. Un resort que nos ofrece una visión de la historia, la gastronomía, la vestimenta, las costumbres y la belleza natural de este maravilloso país, a tan sólo dos horas de su capital, Manila.

Villa Escudero es una plantación colonial histórica de la década de 1800. Una plantación de coco fundada por Don Plácido Escudero y su esposa doña Claudia Marasigan. Originalmente dedicada a la caña de azúcar, la hacienda cambió su actividad al coco gracias al hijo del matrimonio, don Arsenio Escudero, en el año 1900. Una plantación agro-industrial pionera, que construyó una planta hidroeléctrica para abastecer su fábrica y la hacienda.

Abierta al público en 1981, el complejo se ha convertido en un destino turístico de primer orden para los filipinos y también para los turistas que visitan el país. Un resort, escaparate de la rica herencia cultural de Filipinas.

Y con mucha diversión, como un restaurante con cascada incluido que encantará a los más

A Villa Escudero puedes ir a pasar el día y disfrutar de un paseo en un carrito típico carabao, acompañado de músicos y cantantes de serenatas con canciones populares filipinas; y luego almorzar en el restaurante con cascada mientras te bañas. O si lo prefieres, puedes alojarte durante la noche. Hay grandes casas de campo junto al río y apartamentos, cada uno diseñado con materiales autóctonos como el bambú, las hojas anahaw y con madera de coco. Integradas en el medio ambiente, muy frescas y bien ventiladas. Las tarifas se basan en el número de ocupantes e incluyen las tres comidas. Desde 70 euros por persona y noche.

Y las actividades son de lo más variadas. Hay un Museo, en una réplica de una vieja iglesia con tesoros de arte religioso colonial. Altares de plata, carrozas doradas, santos de marfil, túnicas bordadas, cuadros. La mayoría de la época colonial española. Actuaciones culturales y folclóricas filipinas. Puedes navegar por el lago en antiguas balsas de bambú, las que se utilizaban en los viejos tiempos. Explorar la plantación de coco y sus aldeas. Deportes como montar en bici o jugar al tenis, y también jugar al ping pong o al billar. Y si lo tuyo no es el deporte hay karaoke para reirse un rato.

Pero la actividad principal el el avistamiento de aves. Más de 181 especies diferentes revolotean alrededor. Paisajes increíbles y costumbres milenarias para conocer un poco mejor un precioso país muy cercano: Filipinas.