En agosto también se puede esquiar en Europa

Hace unos días te contábamos que las estaciones de esquí del Hemisferio Sur están a pleno rendimiento estas semanas, disfrutando de los mejores momentos para la práctica del deporte blanco. Sin embargo, también en Europa es posible deslizarse por montañas nevadas a pesar de que el calendario nos recuerde que estamos en agosto y, por tanto, en pleno verano.

No son muchas las estaciones que lo permiten, pero sí algunas como las que te enumeramos a continuación.

1. Tignes (Francia). En el corazón de la Saboya, en los Alpes Franceses, encontramos el glaciar de Tignes, que con sus 3.400 metros de altitud permite esquiar también en verano, Además, precisamente por el buen tiempo, se puede complementar con bastantes actividades simultáneas. De hecho, lo habitual es pasar la mañana esquiando en los 20 kilómetros de pistas para, por la tarde, dedicarse al cicloturismo, un buen baño en los lagos de la zona, tenis... Con la tarjeta Sportignes puedes practicar muchas actividades durante el resto del día.

2. Los Dos Alpes (Francia). El glaciar de Les Deux Alps se encuentra a 3.600 metros de altitud y es uno de los mejores snowparks del mundo, y de los pocos que pueden presumir de encontrarse también abiertos durante el verano. Aquí la actividad se complementa con actividades como ciclismo de montaña, parapente o ráfting. Está en el corazón de Oisans (en el valle de Isère, a no demasiada distancia de Grenoble). Cuenta con 8 pistas abiertas, de las que dos son rojas y cuatro azules y verdes, respectivamente.

3. Fonna (Noruega). Se trata de una estación diferente al resto, en tanto que abre precisamente en verano. En concreto, en el mes de mayo. Y no lo hace antes porque la nieve que cae en invierno es tanta que se hace imposible acondicionar una estación en el galciar de Folgefonn. Ahora, con remontes y máquinas ya listas, es el mejor momento. Además, el esquí se complementa con paseos en káyak y rutas de escalada en nieve y hielo.

4. Hintertux (Austria). Esta estación de esquí austriaca abre los doce meses del año, con una temporada estival que abarca desde mediados de mayo a mediados de octubre. Ofrece 60 kilómetros de pistas y un parque central con todo tipo de actividades. Además, se puede pasear por el glaciar, así como entrar en zonas de cuevas que en invierno es complicado.

5. Saas Fee (Suiza). Para poder esquiar en el glaciar y las lomas nevadas de este pico de 3.600 metros de cota esquiable es necesario subir antes a un funicular y a un cable car. Al llegar, tendremos para nosotros 20 kilómetros de pistas y, además una zona para poder practicar freestyle, saltos y todo tipo de acrobacias. Cuenta con una zona especial para chill out.