Muchos diseñadores aprovechan la Semana de la Moda de París para sorprender con sus diseños revolucionarios. Así lo ha hecho la firma Schiaparelli, que presentaba el vestido más viral del evento, pues está hecho con elementos como móviles, discos, placas base, calculadoras y hasta un ventilador de un ordenador, todo reciclado.

Eduardo Navarrete señala que "lleva mucha morralla", pero destaca que lleva "un montón de bisuta". "Esto es como echarle azúcar a una mierda. No lo he probado pero seguro que está buena", comenta.

Pero a este diseño le ha salido un competidor, las botas-flotador, algo que no convence al experto en moda: "Parece una yegua cartujana, una burra percherona". Aunque Valeria Ros les saca un punto positivo, pues apunta que "por contraste, parece que tienes unas rodillas preciosas".