Los adolescentes "cambian mucho de humor, casi como de ropa", apunta Dani Mateo, y señala que, a veces, "no es fácil entenderles", pues utilizan expresiones que pueden escapar a la comprensión de muchos. Por ello, Miki Nadal propone un cursillo rápido para poder "hablar como ellos".

El zapeador aconseja no alarmarse si un adolescente nos dice que está "mamadísimo", pues no se refiere a estar en estado de embriaguez sino a estar fuerte o musculado. Otra de las expresiones que más utilizan es "estar de chill", con la que se refieren a estar relajado o tranquilo.

Iñaki Urrutia indica que "cringe" significa vergüenza ajena y, en el ámbito de los videojuegos, un término propio de los 'gamers' es el de "estar chetado", que hace referencia a tener unas habilidades por encima del resto.