El señor Xplíquer nos cuenta una historia de mucho miedo: la de buscar piso con un sueldo de 1.000 euros al mes. Si aplicamos la recomendación habitual, debería dedicar un tercio de su sueldo al alquiler, unos 360 euros. Sin embargo, incluso doblando esa cifra, y quedándose sin ahorros, en los pisos que se puede permitir no hay lugar para los cuentos de terror.

En uno, no hay espíritus porque es un estudio tan pequeño que no caben. En otro, no hay monstruo debajo de la cama porque le pedían el mes de agencia, el de fianza y las tres últimas nóminas. Y en otro no se puede revivir a Frankenstein porque la factura de la luz no va incluida en el alquiler, y eso sí que da miedo.

Sin embargo, si tuviera el sueldo medio del pudiente barrio de Salamanca (Madrid), 68.333 euros al año, quizás con esos 3.900 euros al mes sí podría dedicar un tercio al alquiler, ya que serían 1.290 euros. Además, lo podría afrontar mientras ahorra para comprarse la casa de sus sueños o, al menos, para comprarse una casa.