Un edificio de viviendas ha sido desalojado en Castellón ante la aparición de grietas tremendas. Los técnicos dieron a los vecinos cinco horas para abandonar sus cosas. Los perjudicados son ocho familias que pagaban un alquiler a un único propietario. Le habían pedido que realizara obras de mejora.

Una de las vecinas asegura a laSexta que está sufriendo un cuadro de ansiedad. "Hace dos días estaba muy bien en mi casa con mi hijo y mi padre y ahora me veo en la calle y sin saber qué va a pasar", ha relatado la mujer antes los micrófonos. Por el momento está en un piso provisional cedido por los servicios sociales. "Nos han dicho que a las 9 de la mañana tienen que salir todos", ha añadido.

En este sentido, denuncia que la culpa la tiene el dueño de la finca y su dejadez. "Espero que no se vaya de rositas y de vacaciones y después a nosotros nos deje tirados", critica.