El virus de la gripe se ha vuelto este invierno caprichoso. No para de mutar y se ha hecho fuerte contra la vacuna. Los síntomas los conocen. Pero si acuden a vacunarse, puede que ya no sirva de mucho.

Cada año la organización mundial de la salud recomienda a los laboratorios realizar una vacuna distinta para una cepa de virus concreta. El enemigo a batir se llama H3N2, pero se ha vuelto resistente, así que la vacuna ha perdido su eficacia hasta en un 50 por ciento.

Al aparecer el frío, los casos se incrementaron. Eso junto con la ausencia de camas, son las razones de la saturación en las urgencias de muchos hospitales el pasado mes de enero. Se ha notado, sobre todo en pediratría y medicina interna en adultos.

Sólo en Madrid, Sanidad tuvo que aumentar en 150 las plazas para despejar las zonas comunes donde los pacientes aguardaban a ser atendidos.

La variante H3 del virus, es precisamente la que provoca mayor mortalidad. Según el informe de vigilancia de la gripe en España, en lo que llevamos de invierno, ya han fallecido 102 personas, la mayoría superaban los 65 años.

El frío regresa este fin de semana. Son los últimos coletazos del invierno. Si no han pillado la gripe, protéjanse como puedan. La vacuna puede que no funcione esta vez