Llevaban tiempo pidiendo explicarse, y el Supremo ya ha puesto fecha a sus deseos. Chaves y Griñán declararán el 9 y 14 de abril por el caso de los ERE en Andalucía.

Este hecho parecía algo incompatible con las lineas rojas del PSOE. Mientras que Pedro Sánchez afirmaba que "en el momento en que estén imputados, les exigiré que renuncien a su acta de senador y de diputado", Susana Diaz aseguraba que "cualquier persona imputada por el Tribunal Supremo va a tener que dejar el escaño.

Sin embargo, ahora matizan que tienen que estar imputados, sí, pero por algún delito. Hernando aclara que hasta que no haya juicio oral, no se van a tomar medidas.

El escrito del juez no especifica cuales son esos delitos, pero la Constitución prohíbe las imputaciones si no hay indicios de uno en concreto. En el caso de Chaves y Griñan, Alaya ve indicios de malversación y prevaricación.

Aun así, en el PSOE aún descartan las dimisiones, y desde el PP, Rafael Hernando pide limpieza a Pedro Sánchez pidiéndole que "coja la fregona y el mocho y se lo pase también al Partido Socialista de Andalucía.

Chaves y Griñán declararán por la concesión de ayudas sociales y económicas a empresas y personas durante su mandato en la Junta de Andalucía. Junto a ellos, el Supremo imputa también a otros tres aforados. Un desfile ante el juez que no manchará la campaña en Andalucía, ya que empezarán a declarar dos semanas después de las elecciones.