Muchos de los consejeros de Caja Madrid que poseían 'tarjetas fantasmas' aseguran que hacían de ella un "uso responsable" para gastos de representación o desplazamientos. Eran 86 los poseedores de estas tarjetas y entre todos gastaron más de 15 millones de euros haciendo un uso presuntamente fraudulento con gastos en restaurantes, viajes o ropa.
Según cuenta este viernes el diario ‘ABC’, las usaban hasta para pagar en Mercadona. Para Anticorrupción, cuenta el periódico, no hay justificación alguna ya que eran gastos personales.
"La mayor parte de las grandes empresas españolas tendrán tarjetas de incentivo cumpliendo las normas de buen gobierno corporativo que en este caso ni se han considerado", afirma Juan Antonio Maroto, Catedrático de Economía de la Universidad Complutense.
Sin embargo, muchos ya han salido a defenderse, como Virgilio Zapatero, consejero de Caja Madrid que afirma que "todo lo que se hizo fue absolutamente legal". Arturo Fernández, el presidente de la patronal madrileña, gastaba una media de 1.000 euros al mes, "lo normal", dice. Pagaba la gasolina y alguna comida “siempre con un uso responsable”, ha señalado.
Unos 28 consejeros siguieron usando la tarjeta hasta después de ser cesados y eso que era “para gastos de representación”.En este aspecto, Hacienda ya ha anunciado que abrirá una investigación a todas las empresas del Ibex 35 para averiguar si reparten tarjetas de este tipo. Cabe destacar, además, que de la lista de consejeros en posesión de tarjetas ‘Black Card’ hubo cuatro que ni siquiera la tocaron.