Yolanda Moratilla, presidenta del comité de energía del Instituto de Ingeniería de España, ha explicado en Más Vale Tarde las razones por las que en Francia están teniendo tantas reticencias a la hora de comenzar las obras para construir el Midcat.

La experta señala que los factores principales son tres: la oposición ecologista en el país galo, su apuesta por la nuclear y un factor económico.

Argelia puede convertirse en el centro neurálgico de exportación de gas a nivel mundial si Europa decide prescindir del gas ruso. Y Francia quiere sacar partido de ello.

Nuestros vecinos ya tienen cuatro regasificadoras y podrían quitarnos el negocio siendo grandes exportadores de gas vendiendo al resto de Europa el que consigan de Argelia a través de barcos. Una estrategia que se uniría a la de exportar su electricidad conseguida mediante las centrales nucleares.

Aún así Yolanda Moratilla avisa que esta estrategia no sería suficiente para que Alemania pudiera sustituir todo el gas ruso, por lo que apuesta por la construcción del Midcat, bien sea a través de Francia o a través de Italia pese a que en este caso habría que esperar de tres a cinco años.