Iñaki Gabilondo ha afirmado en Liarla Pardo que una "moraleja" a la que todo el mundo ha llegado con la crisis del coronavirus es que "un estado o es social fuerte o no no es un estado de verdad".

"Necesitamos unos buenos servicios públicos y eso ya no se puede discutir; necesitamos una gran sanidad pública y eso no se puede discutir y necesitamos una investigación en la ciencia potente y eso no se puede discutir. Deberíamos aprender por lo menos esa moraleja", ha manifestado el periodista de forma contundente., quien ha añadido: "Establezcamos un listón por debajo del cual ya no quepa discusión en torno a la necesidad de servicios sociales potentes".

Asimismo, Gabilondo ha criticado que las fuerzas políticas no estén mostrando unión para buscar una solución conjunta a la crisis por la pandemia. "Nadie está sabiendo muy bien qué hacer porque está ocurriendo algo inédito. Todos están corrigiendo, metiendo la pata de una manera muy evidente. Sin embargo, es llamativo que está habiendo bastante unidad y está subiendo la popularidad de los gobernantes, lo que me llama la atención, como el caso de Macron", ha señalado.

"Nadie está mirando a Latinoamérica y a África"

En esta línea, el periodista ha manifestado que "todos los países demostrando que ninguno tenía ni idea, todos dando palos de ciegos y aprendiendo mal y tarde" y ha lamentado que no se esté mirando a Latinoamérica y a África, cuando "esto es una tragedia global que nos coloca como miembros de la misma especie". "Lo estamos viendo como una perspectiva nacional cuando el virus se cuela en nuestra condición más esencial y es que somos miembros de la misma especie", ha expresado.

La defensa por los oficios "que siempre están al final de la cola"

Además, Iñaki Gabilondo ha hecho una reflexión sobre las actividades esenciales: "Cuando el Gobierno hace el listado de los servicios esenciales, aparecen los últimos de la cola, esos oficios que ningún nativo de España quiere, esos oficios peor pagados, los primeros que sufren los recortes, los primeros que despiden; en conclusión, los últimos de la cola".

El periodista ha destacado así la labor de "barrenderos, basureros, repartidores, reponedores o trabajadores del sector de la agricultura que ahora aparecen en la clasificación de actividades esenciales".

"Deberíamos revisar la lista de nuestros héroes y deberíamos colocar el heroísmo en otro sitio. Junto a los médicos y servidores públicos tan importantes que hay, colocar en otro sitio a los que siempre hemos visto los últimos de la fila y que, de pronto, resulta que son esenciales para el mantenimiento de la sociedad", ha destacado.

"Si no hacemos justicia a las actividades esenciales, no tenemos perdón de dios"

En este sentido, el periodista ha afirmado que "cuando todo vuelva a funcionar, se verá si hemos aprendido cosas lo suficientemente adecuadas para no dejar a nadie atrás". "Y como cuando llegue ese momento no seamos capaces de hacer justicia a estas actividades esenciales, las últimas de la fila de todas las filas, no tenemos perdón de dios", ha expresado el periodista.

"Los trabajadores están arriesgándose para hacer actividades que consideramos ínfimas"

Gabilondo ha reconocido que las personas que trabajan en estos oficios están manteniendo su empleo, "pero están todos los días arriesgándose para hacer esas tareas que nosotros consideramos ínfimas y que ningún español las quiere hacer". "Pienso, sobre todo, en esas mujeres que cuidan a nuestros padres y abuelos, que son migrantes que tienen a sus propios hijos a miles de kilómetros y que son invisibles a la observación social", ha maniestado el periodista.