En España durante la Guerra Civil también hubo casos de desinformación. El más llamativo seguramente fue el que salió en la tercera página del diario ABC del lado republicano del domingo 4 de octubre de 1936. En ella se podía leer: "Las radios facciosas confirman el asesinato de Franco". La noticia lógicamente no era verdad. Pero para que pareciera verosímil decían que la información procedía de la Delegación de Guerra y daban más detalles: "Un radiotelegrafista de Torrevieja ha captado el siguiente radio, emitido por Radio Castilla (Burgos), a las diez y media de la noche: 'Un teniente de la Guardia Civil, traidor a la Patria, que no supo sacrificar su familia, dio muerte a nuestro caudillo, el general Franco'".

Y para darle más veracidad, añadían una segunda fuente: 2Posteriormente, Radio Coruña transmitió una nota biográfica del exgeneral Franco, diciendo que era su necrológica".

Franco en realidad estaba vivo. De hecho, acababa de ser proclamado jefe del Estado en la Capitanía General de Burgos. Pero la noticia se extendió rápidamente. El Diario 'La Voz' del día siguiente ya lo llevaba en portada. Se insistía en que había muerto el cabecilla Franco Bahamonde y hasta las radios dan la noticia.

¿De dónde venía la noticia? La primera vez que está localizado el asesinato de Franco es de pocos días antes pero la historia que contaban era diferente y más pasional. Fue el 1 de octubre. En el diario 'La Libertad' lo titulaban cómo pregunta: "¿Ha sido asesinado el traidor exgeneral Franco?" Y justo encima decían que era "un rumor sensacional". De verdad que lo era porque contaban que todo había sucedido en Tánger, en casa de un doctor falangista: "Dícese que Franco ordenó equivocadamente administrar una fuerte dosis de ricino a la esposa de un teniente de la Guardia Civil. Esta señora abortó y falleció. El teniente de la Guardia Civil buscó a Franco y le hizo varios disparos de pistola".

Cuentan incluso cómo acabó todo: "El exgeneral fue trasladado inmediatamente a Tánger para operarle y falleció poco después de la intervención quirúrgica. El cadáver fue embalsamado y trasladado después a Tetuán". En la última línea ya añaden: "Los fascistas desmienten el rumor, pero se les ve profundamente apenados".

El desmentido ya total llegó del general Queipo de Llano en 'Radio Sevilla'. Allí dijo: "Es que me pasan cosas extraordinarias. Figúrense ustedes que hoy he comido con un cadáver sentado a mi izquierda (…) y presenciado cómo el General Franco, después de hablar, era aplaudido con ardor". Y con esa ironía la desinformación se había acabado.