Quizá ayude en algo, pero la movilización de las viviendas de la Sareb está muy lejos de solucionar el problema del acceso a la vivienda en España. La única vía que ha funcionado en otros países ha sido la vivienda social protegida. El número de Viviendas de Protección Oficial que se terminaron de construir en España a fecha de 2022 según los datos del Ministerio de Transportes fueron 9.021.

Esa es la cifra total en todo el país, pero en el dato por autonomías en función de sus habitantes hay profundas diferencias. A la cabeza está País Vasco: una vivienda protegida construida por cada 1.400 habitantes. La segunda es Madrid, con una vivienda por cada 1.900 habitantes. La tercera, Navarra. Una por cada 2700 habitantes. Muy cerca esta Extremadura, con una por 2.900 habitantes. El principado de Asturias cierra esta clasificación de las comunidades que más Vivienda de Protección Oficial han levantado.

En una zona intermedia están Cataluña, Aragón, Castilla-La Mancha, la Comunitat Valenciana, Baleares, Canarias y Galicia. Allí, en el último año de Gobierno de Alberto Núñez Feijóo, se concluyó una vivienda de protección oficial por cada 26.171 habitantes. Eso es dieciocho veces menos que la comunidad con más viviendas de protección oficial, País Vasco.

La clasificación se completa con las cinco comunidades autónomas que no han terminado de construir ni una sola vivienda de protección oficial en todo 2022. Son Andalucía, Cantabria, Castilla y León, Región de Murcia y La Rioja. Tres del PP, una socialista y otra de Revilla con los socialistas. Y en ninguna de ellas ni una VPO terminada.