Equipo de Investigación mostró en el laboratorio las grandes diferencias que hay entre freír con aceite de palma y de girasol, como reflejó en un programa de 2017 que laSexta ha vuelto a emitir este viernes.

Enrique González, responsable técnico de Quimicral, analizó 100 gramos de patatas fritas hechas con aceite de palma y con aceite de girasol. "En el caso del aceite de palma, hay más de 16 gramos de grasas saturadas por cada 100 gramos de producto. Sin embargo, en el caso de las patatas hechas con aceite de girasol la cantidad se reduce cuatro veces".

Si se compara con el aceite de oliva, el aceite de palma tiene cinco veces más grasas saturadas, por lo que "la diferencia es abismal", en palabras de Enrique González.

Raquel Blasco, endocrina, explicaba que el aceite de palma "altera profundamente el perfil lipídico, el tipo de grasas que tenemos en nuestra sangre"

Además, también indicaba que está relacionado con la "ateroesclerosis", el origen de todas las enfermedades cardiovasculares y que "genera una mayor propensión a la aparición de la obesidad".

No es el único inconveniente, también podría afectarnos al hígado.

No obstante, el colectivo médico le encuentra ventajas. "El aceite de palma no es venenoso, no es tóxico, permite que mucha gente pueda acceder a ciertos alimentos de manera más asequible", defendía la endocrina Clotilde Vázquez.

Asimismo, Vázquez subrayaba que "el aceite de palma contiene vitaminas liposolubles" y concluía que "no se ha puesto en evidencia que poblaciones del sudeste asiático que han consumido este aceite de forma primordial tengan más arterosclerosis, más infartos, más cáncer, o más obesidad que otras poblaciones".

El aceite más polémico es también el más consumido, ya casi representa el 45% en todo el mundo.

*El contenido al que hacer referencia la información forma parte de un programa de Equipo de Investigación de 2019 que laSexta ha vuelto a emitir este viernes.