Un hombre mayor está sentado en una silla a la orilla del mar. Con los pies metidos en el agua y contemplando el horizonte. Así es la fotografía que ha compartido en Twitter el periodista Santiago Souviron y que ha conmocionado a todo el mundo.

"Primero hice la foto, me llamó la atención verle en la orilla mirando al mar. Fui hasta él por pura curiosidad. Al acercarme, lloraba sin parar. Es malagueño, emigró por necesidad y 34 años después ha vuelto a sentarse donde jugaba de niño. Me ha regalado el momento del verano", comenta Santiago Souviron en el tuit, que cuenta con miles de retweets y 'me gustas'.

El periodista ha explicado al periódico 'El Español' que no publicó la fotografía premeditadamente ni tenía pensado el texto con el que la acompañaría. Además, Souviron confiesa que no conoce el nombre del señor ni sabe su edad, solo que rondará los 80 años, y que se lo encontró el pasado lunes en la playa de la Malagueta.

"No tenía pensado el tuit. Al llegar a casa revisé el móvil, vi la foto y me emocioné al recordar lo que me contó. Una mezcla de tristeza y alegría. Lo publiqué dando un par de pinceladas, sin poner la historia completa porque prefiero que quede entre él y yo. No quise desnudar su intimidad", reconoce al periódico.

"Me llevaron hasta allí una serie de casualidades. Había quedado para cenar con un amigo que me llamó a última hora para cancelarlo, así que decidí hacer deporte un rato por el paseo marítimo. Al llegar tampoco me apetecía y fui hasta la orilla de la playa a pasear. Entonces lo vi", apunta el periodista.

"Saqué la fotografía y, cuando me iba, me di cuenta de que estaba llorando, así que me acerqué para preguntarle si necesitaba algo. Me dijo que estaba estupendamente y entonces me contó que había tenido que irse al norte de España por motivos laborales. Al emigrar, conoció a una chica con la que se casó y de la que enviudó. Su hija, que vive en el extranjero, se lo llevó entonces a vivir con él, todavía más lejos de aquí", cuenta Souviron.

El periodista cuenta que el hombre pidió por su cumpleaños, la pasada primavera, que, como regalo, quería volver a su tierra, Málaga, "y ahí estaba, llorando de alegría".

La fotografía, que mezcla "melancolía, amor y dureza", según el autor, ha cautivado a todo Twitter y no tardó en hacerse viral, aunque hay quien acusa al periodista de que se ha inventado la historia. "Entiendo que la gente pueda pensar eso, pero en ningún momento me he sentido ofendido. Es más, había críticas muy graciosas. Ya sabes a lo que te expones. Si publicas algo estás abierto a que te critiquen", explica.

Souviron piensa que la gente está acostumbrada a "noticias negativas y nos olvidamos de que sigue habiendo cosas bonitas, historias sencillas", por eso arremeten contra él.

Así, el periodista no ha querido desvelar más información al respecto y ha querido "dejar una línea abierta a la interpretación de cada uno. Que sea la gente la que complete la historia".