La madre del joven ha iniciado una campaña en redes sociales para que Arshid Hussain, violador en serie condenado a 35 años de prisión por agredir a más de 50 menores, no tenga derecho a influir en la vida de un niño que nació de una agresión sexual.
Los asistentes sociales informaron al condenado de la posibilidad de ver al menor, algo que Woodhouse ha reclamado, ya que ni siquiera la intención de conocerlo nació del acusado. Ha alegando que el violador “es un un peligro" para ella, su hijo y para otros niño, por ello la víctima ha solicitado que se modifique la ley.
En un conocido programa de la BBC, Woodhouse replicó respecto a los derechos del violador: "¿Qué pasa con mis derechos humanos? ¿Qué pasa con los derechos humanos de otras personas y nuestros niños y nuestro derecho a tener que mantener a nuestros niños a salvo constantemente?". A lo que el Ministerio de Justicia del país ha respondido asegurando que se harán esfuerzos urgentes para "abordar los fallos del caso".