Cada vez son más los trabajadores de la Sanidad que sufren agresiones verbales e incluso físicas en el desempeño de sus funciones. Es el caso de Teresa Valle, quien trabajaba como médico en urgencias hospitalarias hasta que un paciente la amenazó de muerte diciendo que iba a buscarla por el hospital para pegarle un tiro.
Harta de amenazas, insultos y agresiones, decidió pedir el cambio a un centro Atención Primaria, pero lo que se ha encontrado, explica a laSexta, ha sido peor. "En los centros de salud una trabaja en una consulta sin vías de escape, en la mayoría no hay personal de seguridad. Me he encontrado con amenazas de 'te voy a violar cuando salgas como no se cure un familiar'", relata.
Agresiones diarias, denuncian los sanitarios, que parece se han normalizado, que "son como la música de fondo en una tienda de ropa", cuenta Víctor Aparicio, enfermero.
Sólo en Málaga, este verano ha habido una decena de agresiones físicas. Explica Rafael Ojeda, presidente del Sindicato Médico Andaluz que hay pacientes o acompañantes que incluso entran en las áreas de urgencias con armas. La situación la definen como "muy alarmante".
Por eso, piden a la Junta medidas urgentes y eficaces. "Se ha dado por hecho que estamos ante un problema irresoluble. La Junta tiene que aceptar que el plan contra agresiones a los sanitarios no está funcionado", inciden desde el sindicato.
Y las agresiones, aseguran, quedan impunes porque "al agresor le sale prácticamente gratis pegarle a un profesional sanitario". Precisamente, esa falta de impunidad y el miedo hace que muchos sanitarios no denuncien.
Los profesionales achacan esas agresiones a la falta de recursos, a falta de personal, a demora en las citas... "Eso hace que tanto familiares como pacientes se desquicien y los que estamos al pie de cama nos terminamos llevando el primer bofetón", denuncia Aparicio.
Desde el Sindicato Médico Andaluz aseguran que "hay un desfase enorme entre lo que se le promete a la población y a lo que se encuentran en la realidad", una asistencia médica limitada y con pocos recursos.
Otro gasto más
La denuncia de los trabajadores sobre las cenas de Navidad: tan solo un 15% las pagan las empresas
Las cenas de empresa ya no son lo que eran. Los trabajadores se quejan de que estos eventos tienen precio de oro y que ya no los paga la empresa, sino que el dinero sale de su propio bolsillo.