Continúa el shock vivido este lunes tras el accidente en la carretera de subida a los Lagos de Covadonga que podría haber sido una auténtica tragedia. El suceso sigue investigándose pero diversos testimonios de testigos han dado cuenta de lo que sucedió.
El accidente tuvo lugar poco antes de las doce del mediodía a la altura del kilómetro C0-4, la carretera que une Covadonga y los Lagos, trayecto que, dada la elevada frecuencia de viajeros que hay en verano, tiene limitada la circulación de vehículos privados y se cubre principalmente con autobuses.
El autobús accidentado se salió de la calzada por el margen derecho tras superar el Mirador de la Reina y, según testigos presenciales, tras dar dos vueltas de campana, se detuvo sobre uno de sus costados en una zona en pendiente, con vegetación baja y sin arbolado. Aunque las causas del accidente están siendo objeto de investigación, algunos pasajeros han comentado que el autobús iba a poca velocidad y que volcó lentamente después de frenar y cruzarse con otro vehículo que circulaba en dirección contraria.
Antonio, un taxista que conducía por la zona en el momento del accidente, y con el que ha podido hablar laSexta, relataba ante los medios cómo había escuchado "gritos": "Si da dos vueltas de campana más el autocar, no lo cuenta nadie", sentenciaba el testigo, que sostenía que el conductor del autobús, amigo suyo, se había llevado la "peor parte".
El autobús, con una antigüedad de nueve años y cuatro meses y equipado con cinturones de seguridad, había pasado la ITV a principios de este mes, y el conductor, un profesional con 21 años de experiencia que habitualmente hace este trayecto, había hecho su descanso reglamentario los días 25 y 26 de julio, según Alsa.
Esta ruta en la zona más visitada de los Picos de Europa la llevan a cabo "los conductores más experimentados" y, según la compañía, cuentan además con una "formación específica en conducción en carreteras de alta montaña".
Seis heridos graves
Seis personas han resultado heridas graves "con pronóstico reservado", otras seis menos graves y 37 leves al despeñarse este lunes un autobús con 48 pasajeros y el conductor que cubría el servicio entre Covadonga y los Lagos, en la vertiente asturiana del parque Nacional de los Picos de Europa, según fuentes sanitarias y de la Guardia Civil.
Este es el último balance de heridos que ha dado a conocer la vicepresidenta del Gobierno asturiano, Gimena Llamedo, que ha aclarado que entre los heridos hay al menos un extranjero de nacionalidad austriaca y vecinos de Madrid, Aragón, Cataluña, Andalucía y Extremadura que se encontraban de vacaciones por Asturias.
Entre los 48 pasajeros, había diez menores de entre ocho meses y 13 años, ninguno de los cuales sufrió heridas de gravedad, aunque sí fueron trasladados hasta los hospitales Arriondas y Gijón junto a sus familias.
Los seis heridos que revisten mayor gravedad fueron trasladados hasta el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA), en Oviedo, y al de Arriondas, cuatro de ellos en helicóptero. También sufrieron heridas de cierta consideración otros seis pasajeros, de los que tres fueron atendidos en el Hospital de Arriondas, el más cercano al lugar del accidente, dos en el Valle del Nalón, en Langreo, y otro en el de Cabueñes, en Gijón, ha detallado el 112 Asturias.
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Los otros 37 ocupantes del autobús resultaron heridos de levedad por golpes y contusiones, y de ellos, a las 19:00 horas ya habían recibido el alta médica 19, ya que todos fueron trasladados hasta centros sanitarios para ser atendidos.
"Pudo ser una tragedia"
El presidente del Principado, Adrián Barbón, ha seguido el dispositivo y las labores de asistencia desde Luarca, en el occidente de Asturias, donde celebra la última reunión del Consejo de Gobierno de la pasada legislatura. "Pudo ser una auténtica tragedia", ha señalado el presidente del Principado, Adrián Barbón, que ha seguido el amplio dispositivo desplegado desde Luarca, donde se reunía hoy por última vez el Consejo de Gobierno.