Una mujer de 74 años de edad ha muerto en el municipio pontevedrés de Cuntis debido a una intoxicación con monóxido de carbono producida por la mala combustión de un brasero que había colocado en la cocina de su vivienda. Según ha informado a Europa Press el responsable de la agrupación de voluntarios de Protección Civil de Cuntis, la víctima había colocado un brasero en la cocina para combatir las bajas temperaturas de las últimas horas, pero éste "fue combustionando y produjo monóxido de carbono". "La mujer ni se enteró", explicó.
Las hijas de la víctima llamaron al teléfono de su vivienda pero no hubo respuesta alguna. Esa misma noche intentaron contactar de nuevo con ella de manera fallida. Por ello, las hijas avisaron a una prima, que se acercó a la vivienda y se percató de que la televisión y las luces estaban encendidas. Cuando entraron en la casa encontraron a la víctima "moribunda", por lo que se dio la voz de alarma a los servicios sanitarios, según explicó el alcalde de Cuntis.
Los profesionales sanitarios intentaron reanimarla "durante una hora", aseguraba el alcalde, pero ya no pudieron hacer nada por su vida. El regidor explicó que en el lugar había "una concentración altísima" de monóxido de carbono, que llegaba a "180" al llegar los equipos de emergencia. El brasero que provocó la tragedia, según el alcalde, "tampoco era muy antiguo" y creen que lo que había empleado la víctima era leña porque se encontraron cenizas.
El año pasado en Galicia 14 personas fueron ingresadas y tres de ellas fallecieron como consecuencia de este tipo de intoxicación doméstica. La Consellería de Sanidad ha recomendado que "si alguna persona nota los síntomas" anteriormente indicados, "apague la fuente de combustión" y "abra puertas y ventanas para respirar aire fresco". También, se ha incidido en "la necesidad de ponerse en contacto con Urgencias Sanitarias en el 061 (teléfono de contacto)" o "acudir directamente a un centro de urgencias".
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