La Fiscalía de Marsella ha anunciado este miércoles que se han encontrado los dos últimos cuerpos de debajo de los escombros después de que se derrumbara el pasado fin de semana un edificio en la ciudad por una gran explosión de gas, que ha dejado como balance final un total de ocho muertos.

"La cifra final es de ocho personas muertas", ha detallado la fiscal Dominique Laurens, agregando que siete de los seis cuerpos extraídos de los escombros fueron identificadosel martes a primera y última hora del día, mientras que otro lo ha sido a última hora de la tarde de este miércoles.

Asimismo, ha señalado que los indicios recopilados durante la investigación confirman la hipótesis de que el edificio se derrumbó tras una explosión por un escape de gas. De hecho, entre los escombros los investigadores encontraron medidores de gas, ha informado la cadena BFMTV. El suceso, por el que se dio por desaparecidas a ocho personas, confirmadas ya como muertas, obligó a evacuar a unas 200 personas de edificios cercanos, mientras que las autoridades pusieron en marcha un teléfono para los afectados.

El inmueble siniestrado se encuentra en el número 17 de la calle de Tivoli y el derrumbe, que se produjo en torno a las 00.40 horas (23.40 GMT) de la noche entre el sábado y el domingo, afectó también a los edificios colindantes. Ese mismo día las tareas de rescate se habían visto enormemente dificultades por un incendio en los restos del inmueble.

El suceso despertó una fuerte conmoción en Marsella, ciudad que ya sufrió en 2018 el colapso de dos edificios antiguos con un balance de ocho víctimas mortales. Aquellos sucesos, además, destaparon una grave crisis de vivienda por el mal estado de muchos edificios de la ciudad, lo que obligó a trasladar a algo más de cuatro millares de vecinos. En esta ocasión, las autoridades locales han asegurado que el edificio no se encontraba en mal estado.