La pandemia de coronavirus ha cambiado notablemente la forma de ligar y cada vez se recurre más a las aplicaciones de contactos. En ellas, la foto es muy importante porque las primeras impresiones siguen jugando un papel clave, sin embargo, hay algo que cada vez pesa más a la hora de seducir: no tener faltas de ortografía al escribir.
Según un estudio de la Universidad de Alicante y la de Navarra, el 82% de las mujeres se echa hacia atrás a la hora de tener una cita si hay faltas de ortografía en las conversaciones mantenidas previamente.
No obstante, en el caso de los hombres, la situación cambia bastante y únicamente un 42% rechazaría tener un encuentro por esta misma causa.
Además, este mismo estudio revela que la espontaneidad, lo que se sale de lo previsible, es un valor al alza porque la mayoría de las mujeres rehúyen conversaciones que empiezan con saludos genéricos.
Por otro lado, la foto de perfil también es esencial. De hecho, si en la imagen que se incluye se sale mirando directamente a la cámara, hay un 20% más de posibilidades de obtener un 'like'.
Más Noticias
- Una adolescente apuñala a otra tras una pelea en Bilbao
- Muere una mujer y otras dos resultan heridas leves en el incendio de un piso en Mallorca
- Así contó laSexta la indignación popular tras conocerse la sentencia de La Manada, de la que se cumplen 6 años
- El Supremo de Italia da la razón a Juana Rivas y obliga a repetir el juicio civil que separó a sus hijos
- La Justicia ratifica que llamar "gilipollas" a un jefe no es motivo de despido
Tampoco hay que olvidar la descripción de la biografía, tal y como explica Vicente Balbaste, portavoz de Tinder en el Sur de Europa. "En las bios lo que más triunfa es cuando se describe de forma extensa cuáles son las actividades que más les gusta practicar, que tipo de intereses, de preferencias tienes. Eso es una forma de atraer a otras personas para conocer", sostiene.
Con algún 'pero'
La Justicia ratifica que llamar "gilipollas" a un jefe no es motivo de despido
Así lo ha ratificado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM). Eso sí, enfatiza que el insulto debe ser "concreto y aislado" en un contexto determinado, como el caso de un empleado al que le pidieron que se quedara a una reunión al terminar su turno.