En lamentables condiciones, así encontraron a una anciana en Santa Cruz de Tenerife a la mujer que su propio hijo había dejado morir de hambre, hasta el punto de que la mujer llegó a pesar sólo 25 kilos. Tras conocerse los hechos, en el verano de 2015, la juez decretó el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza por homicidio para el hijo.

El hombre, de 41 años, está acusado, según fuentes judiciales, de un presunto delito de homicidio por omisión al dejar morir a su madre por inanición.