Tres policías han sido imputados por la muerte de un joven en el interior de su casa en Madrid. Los agentes defendieron que el joven les había atacado previamente con un cuchillo. En laSexta hemos podido hablar con la madre de Kevin, de 21 años, que busca respuestas de un caso que nos ayuda a comprender.

"(Kevin) Fue a la cocina y buscó un cuchillito, yo le dije 'estate quieto'", nos cuenta. Ella decidió abandonar la casa con sus otros dos hijos y su nieta y llamar a la Policía: "Estábamos fuera esperando que ellos fueran y le dijesen 'tranquilizate', yo creia que era eso lo que iban a hacer, pero en nada se oyeron los tiros".

Uno de esos disparos se puede ver aún en la puerta de la casa. "Cuando subimos el ascensor y llegué a la puerta me dijeron 'váyase, señora', y mi hijo estaba muerto en en suelo ya", lamenta.

Fuentes de la Policía informaron que el 26 de noviembre el joven se abalanzó sobre los agentes tratando de agredirles con un arma blanca, un cuchillo que era "de cortar patatas".

Tras los disparos hubo intentos de reanimación realizados por el SAMUR, pero los sanitarios no pudieron salvar la vida de Kevin. "Yo quiero que se haga justicia para que no le pase otras familias", expresa.