El hombre marroquí de 30 años que disparó un tiro en la cabeza en Galapagar, a una mujer de 27 de la misma nacionalidad y que luego se suicidó con el mismo arma era su expareja, que tenía una orden de alejamiento de ella, han informado fuentes de la investigación.
La mujer sigue ingresada en estado crítico en el hospital Puerta de Hierro de Majadahonda, Madrid, mientras que está previsto que se practique la autopsia del cadáver de su expareja.
El agresor realizó sobre las ocho de la tarde un disparo a la cabeza de la víctima en un aparcamiento de Galapagar situado junto al centro cultural La Pocilla. Sanitarios de una unidad de vigilancia intensiva móvil del Servicio de Urgencia Médica de Madrid atendieron a la víctima que se encontraba inconsciente y en parada cardiorrespiratoria y, tras practicarle maniobras de reanimación, la trasladaron al citado centro sanitario.
Tras conocer el suceso la Guardia Civil desplegó un dispositivo para localizar al autor de la agresión, que se había ido del lugar en coche, hasta que localizó anoche el cadáver del hombre en el interior de su vehículo en la urbanización Los Arroyos de El Escorial, Madrid, donde supuestamente se había disparado con el mismo arma.
Los agentes han confirmado que se trataba de la expareja de la herida de la que tenía una orden judicial de alejamiento.