Bajo continuas amenazas de muerte, un hombre violó a una joven de 21 años en Reino Unido. El agresor siguió a su víctima, que iba con su hija, por la calle y cuando la mujer llegó a casa asaltó el domicilio, según 'Mirror'.
Ya dentro del inmueble, el hombre llevó a la víctima a una habitación donde la obligó a desnudarse y tumbarse en el suelo. Tras la violación, el agresor se entregó a la Policía arrepentido por el delito que había cometido.
En su declaración ante los agentes, el hombre dijo que no iba a mentir y admitió que fue "a buscar a una víctima". A continuación, añadió que pensaba continuamente en escenas de violencia sexual.
Según explicó la víctima, estaba aterrorizada por su vida y también por la de su hija. Ahora, la Justicia ha condenado al hombre a cadena perpetua porque "representa un riesgo para la sociedad".
