Rodeado de micrófonos a su salida de los juzgados. Es el hombre que hizo el pozo por el que cayó Julen. En apenas unas palabras ha explicado que su versión no ha variado. "Yo lo tapé todo muy bien", ha señalado Antonio Sánchez ante los medios. Un testimonio clave porque contradice al del propietario de la finca.

Durante esta jornada se ha conocido también el relato de los senderistas que ayudaron a la familia. Uno de ellos cuenta que al acercarse, el padre del niño trataba de llegar hasta él. "José intentó coger un tubo y meterlo en el pozo".

El excursionista ha descrito la desesperación de la madre de Julen en ese momento. "Estaba allí llorando, ella me contó que no podía vivir otra experiencia de una pérdida de este estilo. Que ella se moría".

La otra excursionista testigo dice que no podía creerse lo que sus ojos veían. "Por la dimensión del pozo. Me quedé tumbada en el suelo hablándole al niño".

Sobre el pozo cuentan lo difícil que era verlo y que tampoco apreciaron señales de que estuviera sellado. Que si no se lo hubieran dicho, no lo habrían visto.