Mientras disfrutaban de la carrera de caballos en el hipódromo, varias avionetas aterrizaban en la pista. Cuando el evento acabó, vieron a lo lejos una de ellas y se les ocurrió hacerse un selfie con una.

Se acercaron a la pista con la intención de hacerse fotos y que la avioneta saliese detrás de ellas. Con el ruido de la música de las carreras y de la pista no escucharon que la avioneta se acercaba demasiado y ésta les golpeó, cortándoles la cabeza instantáneamente con una de sus alas.

El piloto tuvo que realizar varias maniobras para intentar esquivar a Mitzia Crisbell y Clarissa. Cuando aterrizó la avioneta, observó los cuerpos sin vida de las dos amigas y no dudó en huir de la pista de aterrizaje.