Mediante el sistema de inspección de equipajes, los agentes se fijaron especialmente, al observar por la máquina de RX, en un cuadro que había sido facturado por equipajes especiales de bodega, que presentaba unas diferencias de masa y tonalidades en el interior de su marco.

Este cuadro fue trasladado a una sala aparte, para revisarlo en profundidad, ya que había posibilidad de llevar droga oculta en él. Seguidamente, se procedió a identificar en la puerta de embarque del vuelo con destino Milán, al propietario de dicho equipaje, que fue llevado a esa misma sala.

Ya en presencia del pasajero propietario del cuadro a revisar, los agentes realizaron una perforación en el marco de madera, extrayendo de éste una sustancia en polvo de color blanco que, al ser analizada, dio positivo en cocaína, por lo que se procedió a la detención de dicho pasajero.

Una vez realizado el pesaje exacto de la cocaína, dio como resultado 1,681 kilos, lo que, según la Guardia Civil, habría alcanzado en el mercado final de consumo un valor aproximado de unos 100.000 euros. El detenido ha ingresado en prisión, por un delito de tráfico de drogas.