La Policía Nacional ha arrestado en Don Benito, Badajoz, a tres personas implicadas presuntamente en el intento de venta de un bebé recién nacido. Los detenidos son un matrimonio formado por un hombre de 42 años y una mujer de 43 y la propia madre del bebé, de 28 años, que ha quedado bajo custodia policial.

Según ha informado el propio cuerpo policial, fue el personal del hospital de Don Benito-Villanueva de la Serena quien avisó a la Policía Nacional de que una mujer que acababa de dar a luz quería registrar a su bebé con unos datos que no cuadraban con los que aparecían en su historial clínico.

Los sanitarios asimismo alertaron de que la mujer no había aportado documentación original en el momento de su ingreso, sino tan solo una fotocopia de una tarjeta sanitaria a nombre de una mujer cuyo historial clínico no era compatible con su exploración física. Los agentes entrevistaron entonces en el propio hospital al supuesto padre del niño y, ante las numerosas incongruencias en sus declaraciones, investigaron y concluyeron que la verdadera madre del bebé había sido ingresada con los datos de su esposa.

Finalmente, él mismo reconoció a los policías que habían pagado 2.000 euros en Rumanía para comprar al recién nacido y admitió que la mujer ingresada no era su esposa. El trato lo habían cerrado tres meses antes en dicho país.

La versión de la pareja: querían "ayudar" a una amiga sin tarjeta sanitaria

Pero ahora, el abogado de la pareja defiende que la declaración en la que el supuesto padre reconoce haber pagado en Rumanía para comprar al recién nacido, es "nula" porque no hubo presencia de letrado.

Asegura que lo que la pareja quería era "ayudar" a una amiga que no tenía tarjeta sanitaria para ser atendida. "Ha sido un parto en territorio español por una ciudadana rumana que no tenía Seguridad Social y ha usado el de un amiga", ha explicado el letrado a las puertas de los juzgados de Don Benito (Badajoz).

De acuerdo con el comunicado policial, los tres pasarán a disposición judicial este miércoles. A los detenidos, se les atribuyen delitos de suposición de parto y alteración de la paternidad, suplantación de identidad y falsedad documental.

Asimismo, la Junta de Extremadura ha confirmado a la misma agencia que tanto la madre como el bebé, que permanecen en el Hospital de Don Benito-Villanueva, se encuentran bien, mientras que la Justicia ha iniciado los trámites para que se haga cargo del recién nacido la Administración regional.