"Según se desprende
de las investigaciones, la joven discapacitada era obligada a mantener
relaciones sexuales, bien de forma individual, bien con las ya detenidas, a la
que sometían a continuas vejaciones y maltratos, apoderándose de todo el dinero
que la víctima obtenía de los servicios sexuales que realizaba", dice la
Guardia Civil en un comunicado.
La operación policial se
inició en febrero después de que la joven de 22 años, que acreditó una
discapacidad intelectual del 40%, denunciara un presunto delito de prostitución
y explotación sexual en un domicilio de Carabaña.
Las presuntas autoras
son dos jóvenes españolas de 29 y 23 años que habían presentado una denuncia
falsa por lesiones leves con el objetivo de encubrir la actividad criminal que
realizaban. Las detenidas, que han sido puestas a disposición de las
autoridades judiciales competentes, ofrecían los servicios sexuales de la
víctima a través de una página web.